IMAR LAMONEGA El corazón es patria soñada, prometida





PRELUDIO: DE AMORES Y ETERNIDADES

BERISSO, NOVIEMBRE DE 1956

 

BERISSO, MARZO DE 1958

 


CON EL ROSTRO QUE MÁS AMAS

A uno le acontece debajo de sí mismo
otro, más parecido,
a juzgar por el cambio de luces en sus ojos
y el modo de volar su boca hacia la mía.
También me pasa
gente que ni conozco,
mucha cuando me asomo al nuevo corazón,
y yo encantado de serles, imaginen:
nace coral la voz, el acto, el ojo.
Claro, te hacen de todo,
menos meterte miedos, mitos de la muertita,
para que no le pierdas la vista al pueblo.


PRESENCIA DEL NIÑO

Buenas noches, amor mío.
¡Trajeron rosas! ¿En dónde?
¿Qué debo estar confundido?
Es extraño…Si no mientes,
es que perfuma el retoño
que comba ya tu vestido.


¡NACIÓ MI NIÑA!

Río
¡nació mi niña!
corre de ceibo en ceibo
por esas islas,
despierta las hortensias,
grita a la viña:
¡nuestro poeta tiene una niña!

¿Gorrión, has escuchado?
¡Nació mi niña!
vuela de nido en nido,
de orilla a orilla,
hasta que todo el monte
murmure al alba:
¡Nuestro poeta tiene una niña!


PRIMER MOVIMIENTO.
BANDONEÓN MEMORIOSO

POETA ESTIBADOR

pensás al ver los focos en clima de anfiteatro
y saltás varonil sin camisas silbando
a estibar voluntario en la panza del barco
cuando el güinche de pronto iza la tonelada
el estrobo hipnotiza penduleando carajo
alarga apergamina mi jeta de italiano


CANTO AL SUBURBIO

Suburbio triste
de la enorme pena.

Una cola de gente
baja la escalinata
del muelle
y el barquero  –Caronte,
que fuerza tienes!–
pone proa a un infierno
entre barcos ingleses.

Hay un duelo de brisas
en el ambiente:
la gris trae denso güano,
delta la verde,
y un griterío enorme
por las paredes.

Pasan blusas ceñidas,
tacos alegres
y piropos blandidos
como un ariete.
El tango Cambalache
va con las gentes.
Todos al monopolio
que mata reses.

Color pobreza el cielo.
Ningún juguete en los escaparates.
Llueve.

Suburbio, te he leído
desde purrete
con una gran canasta
por esos muelles
y sé que eres buen libro
porque no mientes



SEGUNDO MOVIMIENTO.
PARA PIANO DE RON TOCADO ANTE LAS OLAS

Cuando pisé el exilio
sentí pasar lentísimo un ojo de huracán,
pavura
al ver la equis de papel en los vidrios,
enorme y negra equis proyectada en mi alma.

Alguien me interrogaba, helándome la sangre,
con indecible voz
de acento igual oído a parturienta.

¿Era Juan quien tocaba en un piano de alcohol
a su amante, la Muerte, sentado ante las olas,
en tanto yo
bajaba
a recorrer mi infierno?

Acodado en la altura de la idea de mi muerte,
miraba hacia una austral aldea de desdichas.


DELTA DE LA NOSTALGIA

A Federico Luppi, Walter Elenco y Juan Muzzadi

Federico,
entro al ron,
taberna donde duran en curda los piratas,
a sufrirte despacio acodado en el párpado.
Telones de tristeza, de océano por medio,
garúan si apareces
a proscenio de alguna ternura de Chejov,
desbordante de talento.

Walter,
tenías la cabeza caída hacia el violín
cuando solté la guillotina del adiós.
Yo sentí por la espalda el balazo de un tango.
Tu mejilla me oprime cálida el corazón
y lo traspasa tu arco.

Juan,
en la prisión,
entre plantas carnívoras succionándome médula,
te sentí como un golpe de orgullo.
Por ustedes, malditos,
el alma se me pianta Alfonsina hacia el mar.


DIBUJO

el trazo azul de un niño
subiendo el horizonte
por encima del árbol
solito de su miedo
para el tamaño
de su asombro ante el mar.


SONRISA INTERMINABLE

Fugaz testigo y huésped del oleaje,
tuve tiempo de mito,
mi casa en la sonrisa más amplia de la Historia,
justo en la comisura de más color y ritmo,
donde luce blancura de dientes africanos
y es espuma del mar la risa de Camilo.


TERCER MOVIMIENTO.
SOLO DE BAJO

MILONGA DE LA IGUALDAD

A Nora Frómeta

Traje de Cuba, compadre,
para no olvidarlo nunca
un recuerdo de mujer
que pronuncio con mayúscula.

Fidel la eligió ministro
porque el brillo de sus actos
le dieron la magnitud
de un talento extraordinario.

¿Alguna vez se enteró
de que un ministro burgués
festejara un fin de año
en casa e’pobre?. Ya ve.

La grandeza de principios
que animan a esta mujer.
En la casita de Pablo
(Pablo Pueblo, igual a usted).

Cantó hasta tangos conmigo,
bailó de pronto muchacha,
besó a mujeres y niños
como madre derramada,

y al ofrecerle a mi Rosa
sus cuidados y su casa
si peligraran los hijos,
la emocionó hasta las lágrimas.

Presumo que en el Gobierno
su carga de humanidad
es radar sensibilísimo
frente al reclamo social.

¡Cómo no voy a cantar,
con la pampa a mis espaldas,
a ese ejemplo de mujer,
a la ministro cubana!

Que esta milonga propaguen
las guitarras y el pampero;
que se quede en la memoria
y en el cariño del pueblo.

Octubre de 1974


MAREA DE ELEGÍA

El aire de la marcha es nuevo para todos.
Tengo aún la palabra; la ejerceré más alto.

Llegué con los escombros de un cielo sobre el rostro
y escucho crepitar hogueras de fervor,
fuegos poniendo en fuga bestias que me asolaban.

Nada impide que vea pasar incandescencias,
que sienta una península como siento a mi padre,
que vaya a mirar rostros que quiere la ternura
o el azogue de nada que me revela vida.

La marea está alta, acumula en Los Andes
Nilos como el de Cuba con limo para todos.

El corazón es patria soñada, prometida,
del vuelo vagabundo de la sangre del hombre.

Todo obliga a explorar hasta el adiós final.



Selección de textos y fotos: Jmp

Gracias a Eduardo Manso que hace unos días, en un encuentro de poetas, me obsequió el libro de Imar.

En Banderas reunidas, Edulp (Editorial de la Universidad de La Plata), La Plata, 2010
Leemos en la solapa del libro:
“Imar Miguel Lamonega nació el 3 de Julio de 1934. Escritor, poeta, militante y gremialista. Fue trabajador de YPF en la destilería de Ensenada, delegado del personal, padre de tres hijos y berissense. Abrió con otros compañeros el centro cultural "Caprex" en La Plata. Participaron artísticamente en él músicos como el Tata Cedrón, Quintango, Quinteto Tiempo, entre otros. Publicó artículos en la revista "Crisis". Como a tantos otros compañeros lo despidieron de YPF luego de la huelga de 1968 y lo apresaron por sus actividades gremialistas. Se exilió en el año 1970 en Cuba. Allí se desempeñó como director de la revista "Normas y metrologías". Es nombrado "Responsable de los argentinos" por el ICAP (Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos). Perteneció a la "Brigada Hermanos Saíz", grupo de jóvenes escritores cubanos. Realizó varias publicaciones en la revista "El Caimán Barbudo". Ganó en 1972 el primer premio de la Federación de Mujeres Cubanas con su poesía "Milonga al machismo". En 1971 presenta su libro en Casa de las Américas por el cual recibió una mención especial entregada por Nicolás Guillén. El premio consistía en un manuscrito del "Che” Guevara, que se pierde junto con todas las pertenencias familiares enviadas por barco al país. En 1973 fue finalista del Premio David de Poesía. Retornó a la Argentina en 1974. Recuperó su empleo en YPF del que fue despedido luego del golpe de estado. Jamás abandonó sus actividades políticas y artísticas. En la madrugada del 23 de diciembre de 1976, en presencia de su familia, fue secuestrado por los militares de su hogar de Berisso. Desde entonces no se supo de él. Su esposa Rosa Del Rabal y su hija Gabriela declararon en el Juicio por la Verdad el 24 de Mayo del 2000. En el 2010 su hija Gabriela, luego de un trabajo de recopilación, arte y armado, logró presentar el libro Banderas Reunidas que contiene gran parte de sus poesías en una sucesión de movimientos y musicalidades. Los familiares siguen su lucha por saber qué ocurrió desde su desaparición. No hay cifras oficiales, pero se estima que entre 400 u 800 son los compañeros desaparecidos en Berisso. Zona combativa, obrera, de lucha, de inmigrantes, de sueños… Imar es uno de ellos.”